Juan Manuel Ramos Morales

Único andaluz participante en unos Juegos Paralímpicos en la modalidad de tenis en silla de ruedas, hecho que protagonizó en dos ocasiones consecutivas –Atlanta 1996 y Sídney 2000–, Juan Manuel Ramos, ya retirado, alargó su expediente deportivo con cinco títulos de campeón de España (dos en individuales y tres en dobles) y otras tantas presencias en el equipo nacional de Copa del Mundo, que viene a ser en el tenis adaptado lo que la Copa Davis en el convencional.

Nacido en Marbella (Málaga) el 7 de febrero de 1965, siendo el primogénito de los seis hijos (cinco de ellos varones) que tuvieron sus padres, Manuel y Manuela, Juan Manuel estudió en el centro educativo ECOS hasta COU y luego marchó a Madrid para cursar Ingeniería, si bien al cabo del año regresó a Málaga, donde hizo la carrera de Empresariales. A los 26 años sufrió un accidente de tráfico en un desplazamiento a la sierra granadina fruto del cual quedó parapléjico. Si hasta entonces había practicado deporte con mucha asiduidad y en muy diversas modalidades (esquí, baloncesto, tabla de vela, trial…), a raíz de quedar en una silla de ruedas se decantó por el tenis, que ya era uno de sus deportes predilectos.

Su estreno en competiciones adaptadas se produjo en 1994 con motivo del IV Campeonato de España de tenis en silla, que acogió la localidad leridana de Mollerusa y no lo hizo mal, puesto que llegó hasta cuartos de final en individuales y hasta semifinales en dobles, formando pareja con Manel Palau. En el certamen del año siguiente, en Tres Cantos (Madrid), repitió fase en dobles pero se superó en simples al plantarse por vez primera en la final: Gabriel Villalonga le batió por 7-6 y 6-1. No obstante, en 1996, el malagueño se vengó y se alzó en Logroño con su primera corona nacional en individuales al batir a Villalonga en tres sets (2-6, 6-3 y 6-3), mientras en dobles, por tercer año consecutivo con Palau, llegó a semifinales.

El cetro nacional le había llegado al marbellí después del debut en la Copa del Mundo, que se produjo en febrero de ese año 1996 en Melbourne (Australia). La formación española –Ramos y el bilbaíno Víctor García– se clasificó en el puesto 21.º luego de derrotar a Sri Lanka (3-0), caer ante Japón (0-3) y Tailandia (1-2) y batir en el último duelo a Indonesia (2-0).

Con tal tarjeta, nuestro campeón de España fue lógicamente seleccionado para los Juegos de Atlanta, donde concurrieron 48 tenistas en singles. El malagueño superó la primera ronda –ganó al brasileño Francisco Reis Junior, tras remontar un set (1-6, 6-2 y 6-3)–, pero su camino se vio interrumpido en dieciseisavos de final: el alemán Stefan Bitterauf le batió por un doble 6-2. Por su parte, en el torneo de dobles, con 24 parejas en liza, Ramos y el barcelonés Jordi Ros se despidieron a las primeras de cambio, en dieciseisavos de final, claramente superados (3-6 y 0-6) por los polacos Piotr Jaroszewski y Tadeusz Kruszelnicki.

En 1997, problemas de índole laboral –había empezado a trabajar en la empresa familiar– le impidieron defender en Ferrol su título de campeón de España, si bien sí pudo acudir a la Copa del Mundo celebrada en Nottingham (Reino Unido), esta vez junto al gallego Álvaro Illobre.

El equipo español ganó en primera ronda a Croacia (3-0), pero una lesión en la mano derecha de Ramos le lastró en los siguientes compromisos frente a Nueva Zelanda (0-2), Holanda (0-2) y Suiza (0-2) –tres derrotas–, no así en el triunfo sobre Brasil (2-0), que llevó a España al puesto 23.º. Una semana antes y en la misma ciudad inglesa, Ramos e Illobre compitieron en el Abierto Británico cayendo Ramos en cuartos de final de individuales, ante el coreano Jwak, y de dobles, también ante Corea.

En la temporada 1998, nuestro protagonista volvió a ganar los individuales del Campeonato de España, en Pamplona –ganó en la final al francés Gines Ponsi (6-0 y 6-1), al tener carácter abierto– en tanto que en dobles se hizo con su primer título al lado de un nuevo compañero, Álvaro Illobre, junto al que derrotó al danés Knudsen y al citado Ponsi por 7-6 y 7-5. Ambos, Ramos e Illobre, en compañía de Jordi Ros, representaron a España en la Copa del Mundo de esta campaña, en Barcelona, y que se saldó con la 21.ª posición final tras el siguiente recorrido: victoria ante Chile (3-0) y ajustada derrota ante Rusia (1-2) –quedan a un paso de entrar en la ronda de los 16 mejores–, derrota frente a Tailandia (0-3) y triunfos sobre Malasia (3-0) y Puerto Rico (3-0).

La nueva edición de la World Cup (Nueva York 1999) volvió a ver a los representantes españoles –Ramos, Illobre y Zak Calvo–, quienes previamente se habían ganado el derecho a participar en el torneo clasificatorio de Brastislava (Eslovaquia), imponiéndose en su grupo a Sudáfrica, el cuadro anfitrión e Irlanda. Ya en la ciudad que nunca duerme, España mejoró un puesto (20.º) respecto al certamen precedente al derrotar a México (2-1) en el estreno, perder ante Rusia (1-2), ganar a Irlanda (3-0) y caer ante Suiza (0-3) y Bélgica (0-3) para terminar.

Para rematar el año, en el Campeonato de España llevado a cabo en Figueras (Barcelona), el marbellí solo pudo alcanzar las semifinales esta vez, si bien revalidó su título en dobles junto a Illobre tras batir al dúo Ros-Palau en la final, en tanto que en el Master Nacional, celebrado en Sevilla en febrero de 2000 debido al aplazamiento motivado por el lluvia dos meses antes, nuestro biografiado fue subcampeón –perdió en la final ante Illobre (7-5, 2-6 y 3-6).

De esta forma, en el ansiado año paralímpico, pese a que el tenista andaluz solo pudo llegar a semifinales en individuales y dobles en el Nacional de Cáceres, Ramos siguió en los planes del seleccionador David Sanz, quien lo convocó para el torneo clasificatorio de la Copa del Mundo –España logró el billete al acabar 4.ª en Zagreb– y, por supuesto, para la propia y decisiva Copa del Mundo, ese año en París, adonde viajaron Ramos, Illobre, Calvo e Iván da Silva. El equipo nacional mejoró sus prestaciones de años anteriores al concluir en el puesto 17.º tras ganar a Puerto Rico (2-1), perder ante Israel en el cruce (1-2) y luego derrotar a Finlandia, Austria y Nueva Zelanda.

Así las cosas, Juan Manuel fue de nuevo llamado para representar a España en los Juegos Paralímpicos, los de Sídney 2000. En Australia, empero, el concurso tanto de Ramos como de Álvaro Illobre, el otro representante español, fue un visto y no visto. En individuales, con participación de 48 tenistas, Ramos cayó en primera ronda (1/32) ante el japonés Akio Yamakura, al que solo pudo hacer un juego (0-6 y 1-6), mientras que, por parejas, el andaluz y el gallego, exentos de la ronda inicial (había 21 dúos), accedieron directamente a octavos de final, donde fueron eliminados por el propio Yamakura y su compatriota Satoshi Saida (1-6 y 0-6).

A la vuelta de Sídney, Ramos bajó su nivel y en 2001 dejó paso a otros tenistas más jóvenes renunciando a la Copa del Mundo. Con todo, en el Campeonato de España, en Santander, logró su tercer título en dobles (el quinto en total) una vez más en alianza con Illobre, quien le había dejado con el subcampeonato de individuales.

Llegar a cuartos de final en individuales y a semifinales en dobles (con Illobre) fueron los resultados de Juan Manuel en el Nacional de 2002, en Madrid, penúltima aparición en la elite de nuestro malagueño, quien dejó el deporte por unos años para centrarse en su empresa, dedicada a sectores tan diversos como el inmobiliario, el agrícola o la venta de motocicletas.

Siete años más adelante (2009), Ramos reapareció con motivo del Campeonato de España que tenía lugar precisamente en Marbella. En casa, Juan Manuel reverdeció laureles y llegó hasta la final en ambos torneos, alzándose con dos medallas de plata. En individuales, le ganó una vez más Illobre (4-6 y 0-6) y, en dobles, formando binomio con Francisco Javier Sánchez, no pudo derrotar a Illobre y Rubén Pérez en la pelea por el título.

En 2011, el incombustible Ramos volvió a presentarse al Nacional, en Zaragoza, y accedió a la ronda de cuartos de final en individuales, pero –esta vez sí– este fue su último torneo ya de forma definitiva. Desde entonces, Ramos continúa dedicado a su empresa en la provincia de Málaga y residiendo en Marbella junto a su mujer, Victoria, y su hijo, Manuel.

Biografía cerrada a 31 de marzo de 2018 y extraída del libro 341 Historias de Grandeza, de los autores Pepe Díaz García y Jose Manuel Rodríguez Huertas